La vacunación en España comenzó en diciembre de 2020, dando esperanza a toda la población viendo el final de esta pandemia cada vez más cerca.
Todo iba de acuerdo a lo planeado por el gobierno aún cuando la pandemia llegaba a uno de sus peores datos en enero y febrero de 2021.
A mitad de febrero y principios de marzo comenzaron los problemas cuando algunos países de la Unión Europea decidieron suprimir la vacuna con la marca llamada Astrazeneca por tener riesgos de trombosis.
El gran conflicto llegó cuando había ya una gran población vacunada con ese tipo, sobre todo profesionales sanitarios, profesores, funcionarios del estado y personas mayores de 65 años.
En estos últimos días se ha bajado la edad de vacunación de la Astrazeneca hasta los 60 años, pero tenían pensando hasta los 40.
La crítica que hago hacia este tema es como una vacuna puede ser administrada primero sin estar 100% de su seguridad y segundo en la edad a la que sería recomendable, ya que afecta a los mayores, la población que es más “inestable” en cuanto sobrellevar una vacunación o enfermedad.
Desde mi situación tengo muchos amigos que han sido vacunados con Astrazeneca.
Ellos están seguros, porque confían en la ciencia pero sienten una inseguridad que quizás imposible de controlar.
Un ejemplo que puedo mostrar es como mi amiga fue vacunada al encontrarse en prácticas por ser estudiante de fisioterapia. Al día siguiente cancelaron la vacunación de la dosis que le habían suministrado.
En conclusión, creo que siempre habría que confiar en la ciencia, ya que son los que pueden darnos las principales soluciones, pero no apoyo la situación de inestabilidad que están creando con la vacunación en el país, ya que son vidas las que están en juego.
Os lanzo las siguientes preguntas; ¿creéis que se está llevando un buen plan de vacunación?, ¿confiáis en la vacuna?
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